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21 de noviembre de 2024
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Por Carlos Nasif
Los récords ya aparecen en la fiesta del campo
25 de julio de 2008
Mientras la 122º Exposición Rural de Palermo está tomando forma, con la mayor presencia de visitantes, el ingreso de los animales participantes y el inicio de las actividades propias de la muestra, los números de la expo ya están mostrando los primeros récords.

Los cabañeros, una vez más, apoyaron la exposición a pesar de la difícil situación que atraviesa el sector y el momento particular en el que se realiza esta muestra.

Una de las razas que viene creciendo año a año y que demuestra en Palermo ese desarrollo es la Brangus, que este año tendrá la participación récord de 100 reproductores. Y ese número no es poco teniendo en cuenta lo novato de la raza en la historia de la ganadería nacional. Esta raza es producto del cruzamiento de una animal Brahman y un Aberdeen Angus y está localizada en su mayoría en el norte argentino.

Y casualmente los Angus, fácil de conocer en la Pista Central porque son totalmente negros, es la raza por excelencia en esta Rural, ya que son los más numerosos con casi 200 animales en el predio. Esta cifra es un 25 por ciento más que el año pasado y se nota en el pabellón Azul, donde están alojado.

Muy juntitos están los clásicos rivales, los Herford, de pelaje rojizo y caras blanca, que este año tuvieron una inscripción un tanto menor que en 2007.

El resto de las especies participantes, en general, trajeron más animales a esta exposición, que está creciendo en expectativa, a la espera de la gran semana, la próxima, cuando saldrán a la pista central los principales reproductores del país.

Mientras tanto, la actividad está reducida a la actividad equina, representada por los criollos castrados y ejemplares conducidos por personal militar o de conjuntos representativos.

Las vacas siguen siendo las preferidas la gente a la hora de recorrer la muestra y captan la atención de chicos y grandes. En el pabellón donde se alojan las ovejas también los más pequeños hacen de las suyas.

El imán de la exposición rural de Palermo sigue intacto. Cada hora que pasa de esta exposición lo sigue demostrando.