“El tema del uso del agua en el mundo ha hecho foco en años recientes por dos motivos: necesidad y conocimientos. La demanda de este recurso aumenta con la densidad demográfica y tenemos suficiente información como para optimizar el manejo hídrico”, señaló Gloverson Moro, Director Regional de Investigación de Semillas de Syngenta, durante su disertación en el Congreso Nacional de Aapresid, en Rosario.
Moro explicó la investigación que viene desarrollando Syngenta para contribuir a atenuar el impacto de la sequía en la producción agrícola, puntualmente habló del maíz. “En Syngenta tenemos dos líneas de trabajo, una de índole química y otra genética, que a su vez se puede subdividir en trangénesis y mejoramiento. El objetivo es recuperar parte del rendimiento perdido debido a sequía, maximizar el potencial del cultivo y, fundamentalmente, reducir el uso de agua en zonas donde se irriga”.
El especialista de Syngenta sostuvo que en el aspecto químico se trabaja en un producto, Invisa, que sería lanzado próximamente en los Estados Unidos, “Actúa como un bloqueador de las respuestas al stress hídrico, manteniendo el foco de la planta en la producción. En arroz, por ejemplo, mejoró el rendimiento entre un 10 y 15 por ciento, y en algodón ayudó a mejorar la retención de las cápsulas bajo sequía”.
El maíz tolerante a sequía recupera parte del rendimiento y los desarrollos biotecnológicos de Syngenta apuntan a evitar el impacto de la escasez de agua en los momentos críticos de las plantas.
“Existen 5 grandes grupos para mejorar la habilidad de la planta en el comportamiento en sequía. En floración, cuando comienza a hacerse el grano es clave, entre los 60 y 80 días de implantación, que es un período muy corto y el momento más crítico del cultivo”, expresó Moro.